Eva Torres Giménez
Filóloga y músico, formada en los talleres de Escritura Creativa Fuentetaja, Máster en Edición por la Universidad de Salamanca, correctora de textos, coautora del libro de relatos De la vida y otros viajes (Atlantis, 2008), coordinadora de talleres de escritura creativa, autobiográfica y terapéutica, e impulsora de actos culturales relacionados con la escritura en Alicante ciudad y alrededores. Cursó estudios del Grado en Psicología por la UNED, ha hecho formación en Análisis Transaccional y actualmente sigue el programa SAT de la Fundación Claudio Naranjo insertada en el marco terapéutico de la Gestalt. Colaboradora habitual con Centro Lucentum, Concejalía de Juventud y la Universidad de Alicante entre otras instituciones.
Taller de escritura Creativa
Taller de escritura terapéutica
Al igual que todo acto de escritura creativa es en cierta manera autobiográfico, tampoco es posible desligar la práctica literaria de la autoterapia y sus beneficios psicológicos. Si además de tomar conciencia de esto, elegimos sacarle todo el jugo y dedicar la escritura solamente a este fin, dejando a un lado la creación literaria, descubrimos una herramienta potente de introspección, descubrimiento y sanación, a través del tránsito por las emociones, las memorias, las dimensiones del yo –conscientes y no conscientes– y un medio para la resolución de conflictos, un espacio seguro de aceptación y ensayo de nuestros propios deseos, personajes y contrapersonajes, frustraciones y comunicaciones autoprohibidas. Escribir, como hacer terapia, es un acto de compromiso con uno mismo, un regalo que nos otorgamos para estar mejor en el mundo, conocernos y relacionarlos con los demás. Si además pretendemos ejercer como futuros terapeutas acompañando a otros en su camino, en la escritura hallaremos un medio para descubrir nuestra verdad y tratarnos con total franqueza y compasión, pues pocas intimidades son equiparables a la que podemos establecer entre nosotros y nuestro cuaderno íntimo, el papel en blanco en el que, al igual que el lienzo del artista, imprimimos con nuestro yo más verdadero, aquel que en el mundo social nos cuesta tanto sacar y mostrar al otro.